El
paso del agua de la ría desde su nacimiento a incluye este salto de
agua.
En
algunas ocasiones se puede ver los peces, muiles saltando corriente
arriba cual salmones.
También
es común ver gaviotas y cormoranes “surfeando”, esperando algún
bocado.
Olvidaba
comentar que, en los últimos años, la fuerza del agua se ha llevado
varias piedras de la base de lo que configura el paseo y, por
añadidura el puente de San Sebastián. Espero que en próximos años
no haya que lamentar la caída de éste...
Niamh
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